Soltera, no desesperada
En días pasados salí a comer con Milena, una amiga divertidísima y encantadora que no veía desde abril. Para resumirles su historia, ella estuvo casada, sufrió un montón en su matrimonio y entendió lo apremiante que era recuperarse de aquella relación fallida, por tanto se tomó un sabático sentimental, se cambió el color del cabello,…